Pollo frito Kentucky crujiente y jugoso como en los restaurantes
El pollo frito Kentucky se ha convertido en una de las recetas más populares del mundo gracias a su inconfundible sabor y su irresistible textura crujiente. Lo que comenzó como un plato típico del sur de
Estados Unidos, con el tiempo se transformó en un fenómeno global que conquistó paladares de todas las edades. Su éxito no solo radica en la combinación de especias secretas, sino también en la técnica de fritura que logra un exterior dorado y crujiente mientras mantiene la carne jugosa por dentro.
Además, el pollo frito Kentucky se ha hecho viral porque representa el equilibrio perfecto entre lo casero y lo irresistible de la comida rápida. Muchas personas intentan recrearlo en casa para disfrutar de un sabor auténtico sin tener que salir, y este afán por copiar el famoso estilo ha dado lugar a numerosas versiones que circulan por internet.
Por otra parte, su versatilidad lo ha catapultado aún más: se puede servir acompañado de ensaladas frescas, puré de patatas, mazorcas de maíz o simplemente con unas crujientes patatas fritas. Esto lo convierte en un plato ideal tanto para reuniones familiares como para comidas informales con amigos.
El impacto cultural del pollo frito estilo Kentucky es innegable. Series, películas y hasta redes sociales han contribuido a su popularidad, mostrando cómo este plato se disfruta en celebraciones, comidas rápidas y momentos de ocio. No es solo comida, es un símbolo de sabor reconfortante y compartido.
Finalmente, preparar pollo frito en casa tiene un atractivo especial: la satisfacción de dominar una receta icónica que combina tradición, técnica y un resultado espectacular. A continuación, aprenderás a elaborarlo paso a paso, con consejos y variantes para que quede perfecto y conquiste a todos los comensales.
Ingredientes de la receta
- 1 pollo troceado (o muslos y alitas al gusto)
- 300 g de harina de trigo
- 2 cucharaditas de pimentón dulce
- 1 cucharadita de pimentón picante
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de cebolla en polvo
- 1 cucharadita de orégano seco
- 1 cucharadita de tomillo seco
- 1 cucharadita de pimienta negra molida
- 1 cucharadita de sal
- 300 ml de suero de leche (buttermilk) o leche con una cucharada de zumo de limón
- 2 huevos
- Aceite vegetal abundante para freír
Tiempo de preparación
- Preparación: 20 minutos
- Marinado: mínimo 4 horas (ideal toda la noche)
- Cocinado: 20 minutos
- Tiempo total: unas 5 horas con marinado incluido
Preparación del Pollo frito Kentucky paso a paso
Primero, marina el pollo en el suero de leche con sal y pimienta durante al menos 4 horas. De esta manera, la carne quedará mucho más jugosa y sabrosa.
A continuación, mezcla en un bol amplio la harina junto con todas las especias y hierbas secas. Esto será el rebozado característico.
Después, bate los huevos en otro recipiente. Escurre las piezas de pollo del marinado, pásalas por el huevo y luego por la mezcla de harina, asegurándote de que queden bien cubiertas.
Para un extra de crujiente, puedes repetir el paso anterior, es decir, huevo y de nuevo harina.
Calienta abundante aceite en una sartén profunda o freidora a unos 170 ºC. Es fundamental mantener la temperatura estable para que el pollo se cocine de forma uniforme.
Fríe las piezas de pollo por tandas, sin amontonarlas, hasta que estén doradas y crujientes por fuera, y bien cocinadas por dentro (unos 8-10 minutos dependiendo del tamaño).
Finalmente, escurre sobre papel absorbente y sirve caliente.
Consejos para que el Pollo frito Kentucky quede perfecto
Mantén la temperatura del aceite constante para evitar que el rebozado absorba grasa en exceso.
No saltes el marinado, ya que es la clave para un interior jugoso.
Rebozar dos veces aporta una capa extra de crujiente muy parecida a la receta original.
Sirve de inmediato para disfrutar del contraste entre el rebozado crujiente y el interior tierno.
Variantes de la receta
Versión picante: añade más pimentón picante o unas gotas de salsa de tabasco al marinado.
Al horno: para una opción más ligera, hornea el pollo a 200 ºC hasta que esté dorado y cocido por dentro.
Con cereales: mezcla copos de maíz triturados con la harina para un rebozado más crujiente.
Estilo asiático: agrega salsa de soja y jengibre al marinado para un toque diferente.