Base casera de pizza fácil y deliciosa
Si hay algo que une a millones de personas en todo el mundo, es la pizza. Y aunque existen miles de versiones, la base casera de pizza se ha convertido en tendencia viral porque transforma una cena común en una experiencia auténtica.
Cada vez más personas buscan alternativas naturales, económicas y sabrosas, y esta receta responde a todas esas necesidades.
La popularidad de esta receta no es casualidad. Gracias a su sencillez, cualquier persona puede preparar en casa una base ligera, crujiente por fuera y esponjosa por dentro.
Además, permite personalizarla a gusto, algo que las versiones industriales no consiguen.
En redes sociales, la base casera de pizza ha alcanzado un protagonismo enorme porque no solo es fácil de hacer, sino que también ofrece resultados de restaurante italiano en tu propia cocina. Incluso quienes nunca han hecho pan se sorprenden con lo bien que queda al primer intento.
Otro motivo de su viralidad es la posibilidad de adaptarla: vegana, integral, con fermentaciones más largas o rápidas según el tiempo disponible. Así, cada persona logra una pizza a medida sin complicaciones.
Por último, se ha hecho viral porque representa un regreso a lo esencial: ingredientes básicos, amasado relajante y satisfacción garantizada al sacar del horno una pizza que sabe y huele a hogar.
Ingredientes para la receta de base casera de pizza
- 500 g de harina de trigo de fuerza
- 325 ml de agua templada
- 15 g de sal
- 20 g de aceite de oliva virgen extra
- 10 g de azúcar
- 7 g de levadura seca de panadero o 20 g de levadura fresca
Tiempo de preparación
- Preparación: 20 minutos
- Reposo: 1 a 2 horas
- Horneado: 12-15 minutos
Preparación paso a paso de la base casera de pizza
En primer lugar, mezcla el agua templada con la levadura y el azúcar para activarla. Deja reposar unos 10 minutos.
A continuación, en un bol grande añade la harina y la sal. Haz un hueco en el centro y vierte la mezcla de agua con levadura junto con el aceite de oliva.
Después, comienza a integrar con una cuchara de madera y, posteriormente, amasa en una superficie enharinada durante al menos 10 minutos, hasta obtener una masa suave y elástica.
Luego, coloca la masa en un bol ligeramente aceitado, cúbrelo con un paño húmedo y deja reposar hasta que doble su tamaño (aproximadamente 1 hora).
Una vez levada, desgasifica suavemente la masa, divídela en porciones y estira con un rodillo o con las manos, según prefieras una base más fina o más gruesa.
Finalmente, coloca la base casera de pizza en una bandeja con papel de horno, añade tus ingredientes favoritos y hornea a 220 ºC entre 12 y 15 minutos.
Consejos para que la base casera de pizza quede perfecta
Usa harina de fuerza: garantiza una textura más elástica.
No te saltes el reposo: es clave para que la masa quede aireada.
Precalienta bien el horno: el choque de calor asegura un resultado crujiente.
Variantes de la receta
Integral: sustituye parte de la harina por harina integral para un toque rústico.
Express: reduce el tiempo de levado usando más levadura, aunque perderás algo de sabor.
Fermentación lenta: deja la masa en la nevera 24 horas para una pizza más digerible y con aroma intenso.
Con qué acompañarlo
Una base casera de pizza combina a la perfección con ensaladas frescas, vinos tintos ligeros o incluso cervezas artesanas.
Cómo conservar la base casera de pizza
- En la nevera: hasta 3 días envuelta en film transparente.
- Congelada: puedes congelar la masa cruda o ya horneada, lista para añadir ingredientes y recalentar.